Replantación en Ferris. Volver a plantar, volver a crecer.

Joven, pero preparada para resistir.

Cultivar viña en Universo Ferris no es tarea fácil.

Aquí, la viña no solo crece: lucha y pelea.

El viento de levante y lebeche, la salinidad del suelo, el clima casi extremo...

Todo juega un papel importante en la historia de cada planta.

Cuando una viña es joven, es más vulnerable.

Necesita cuidados constantes. Al final, es como un niño que aprende a caminar.

Y hasta que su sistema radicular se expande y se adapta, cualquier pequeña adversidad puede costarle la vida.

Pero la viña es una de las plantas más fuertes que existen.

Desde hace miles de años, ha demostrado ser un cultivo resistente, capaz de sobrevivir a casi todo... y a casi todos.

Es una planta que se adapta, que se agarra a la tierra con una fuerza única, y que, con el tiempo, desarrolla raíces profundas que la hacen casi indestructible.

Ese es su carácter.

El mismo que luego se refleja en cada uva y en cada botella de vino.

En la primera plantación, alrededor de l 18% de nuestras viñas no sobrevivieron.

No pudieron resistir las condiciones de Ferris.

Siempre es un golpe perder viñas que plantamos con todo el cariño, pero forma parte del proceso de cultivo en un entorno como este.

A mediados de febrero estuvimos trabajando en la replantación del viñedo, reponiendo esas viñas perdidas con mucho amor y con la seguridad de que, esta vez, sí conseguirán establecerse y crecer con fuerza.

Se adaptan, evolucionan y se hacen más fuertes.

Quizás las personas tengamos que aprender a hacer lo mismo.

Aguantar. Reinventarnos cuando sea necesario.

Y echar raíces más profundas para seguir adelante.

Esto no es solo reponer.

Esto es el inicio de algo más grande.

Pronto vendrán nuevas plantaciones, nuevas oportunidades de seguir construyendo lo que es Universo Ferris.

All the best,

Rafa